Un adecuado mantenimiento a cubiertas conlleva una amplia gama de beneficios que fortalecen tanto la infraestructura como las operaciones en bodegas y plantas industriales.

Las obras de infraestructuras se diseñan para una determinada vida útil condicionada por funciones propias del diseño, calidad de los materiales y proceso constructivo. 

Pues bien, no es un secreto para nadie que una de las estructuras que requieren mayor mantenimiento resultan ser las cubiertas de las grandes superficies, esto en primera instancia se debe a que en la mayoría de plantas industriales generan contaminantes químicos durante los procesos de fabricación de productos, al realizar mezclas que reaccionan ante el oxígeno disponible en la atmósfera del área de la bodega.

Estas reacciones pueden causar que la estructura metálica que da el soporte a la cubierta presenten indicios de oxidación y con el tiempo, si no se realiza la intervención correcta se puede desarrollar corrosión en los perfiles metálicos, causando debilidad en la cubierta.

Los agentes ambientales como las fuertes lluvias con granizo, el calor, las diferencias de temperatura en nuestro territorio, los rayos UV, la contaminación ambiental, afectan directamente las tejas que según cada fabricante tienen una vida útil de 3, 5 o máximo 10 años, en condiciones de un correcto plan de mantenimiento.

Estas garantías se reducen y empiezan a perder su finalidad de proteger el interior del ingreso de agua, rayos del sol directos reduciendo las temperaturas, iniciando procesos de deterioros como cristalizaciones, agrietamientos, fisuras, pérdida de hermeticidad, los cuales se deben detectar mediante una revisión periódica entre 6 a 8 meses.

Para el mantenimiento adecuado a estas superficies se realiza impermeabilizaciones, ajustes de tornillería, revisión de flanches, lavado, limpieza de canales y bajantes, que puedan preservar las edificaciones y programar un cambio de tejas progresivo e impedir daños y perjuicios por el ingreso de agua a las instalaciones internas.

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Beneficios del mantenimiento a cubiertas

A continuación, se enumeran los principales beneficios de realizar un mantenimiento proactivo:

1. Integridad estructural: El mantenimiento regular y oportuno ayuda a detectar y corregir cualquier daño o desgaste en la cubierta, manteniendo su integridad estructural y prolongando su vida útil.
2. Protección contra el clima: Un mantenimiento adecuado garantiza que la cubierta sea capaz de resistir las inclemencias del clima, como lluvias intensas, vientos fuertes, nieve y altas temperaturas.
3. Prevención de filtraciones: Las inspecciones periódicas y las reparaciones oportunas evitan filtraciones de agua que podrían dañar la maquinaria, los productos almacenados o causar riesgos para la seguridad de los trabajadores.
4. Optimización del aislamiento térmico: Un mantenimiento adecuado permite mantener un aislamiento térmico eficiente, lo que reduce los costos de energía y mejora el confort dentro de la infraestructura.
5. Seguridad para los trabajadores: Cubiertas en buen estado minimizan el riesgo de accidentes relacionados con el colapso o desprendimiento de elementos, proporcionando un ambiente de trabajo seguro para los empleados.
6. Continuidad de operaciones: El mantenimiento proactivo evita interrupciones inesperadas en la producción o actividades, asegurando una continuidad operativa fluida.
7. Reducción de costos a largo plazo: El mantenimiento preventivo y la identificación temprana de problemas evitan costosas reparaciones y reemplazos mayores en el futuro.
8. Cumplimiento normativo: Mantener en buen estado las cubiertas ayuda a cumplir con las regulaciones y normativas de seguridad y construcción aplicables.
9. Preservación de la inversión: Un adecuado mantenimiento protege la inversión realizada en la infraestructura y ayuda a prolongar su vida útil, maximizando su valor a lo largo del tiempo.
10. Sostenibilidad y responsabilidad social: Al mantener las cubiertas en buen estado, se contribuye a la sostenibilidad y se demuestra el compromiso con la responsabilidad social corporativa al proteger el medio ambiente y la seguridad de las personas.

En conclusión, el mantenimiento de cubiertas en bodegas y plantas industriales ofrece una serie de beneficios significativos que aseguran la integridad estructural, la seguridad de los trabajadores y la eficiencia operativa, protegiendo así la inversión y garantizando el éxito de las operaciones industriales.

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